Logos en Uruguay

Detona Montevideo III: Reytoro – Logos – Sigma – Acto Gore. Viernes 7 de diciembre de 2007. Central - Montevideo, Uruguay.

MG

Al cambio de local a último momento (el toque iba a realizarse en Complejo Troya y me consta que algunos infortunados fueron hasta ahí) se sumó un cambio en la programación, tocando Logos antes que Reytoro. Para mí fue sorpresivo ya que, según el afiche, el evento estaba encabezado por la banda argentina y por lo tanto se esperaba que cerraran éstos. ¡Ojo, que a mí me interesaba ver a Logos y no estuvo mal regresar un poco más temprano de lo previsto! No obstante, debo decir que, lamentablemente, las falencias en la organización de eventos de este tipo siguen siendo moneda corriente en nuestro país: acá muchas veces no se sabe a qué hora comienzan los toques, dónde se realizan e incluso ¡quiénes y en qué orden tocan!

Ingresé a tiempo para ver los últimos 2 ó 3 temas de Acto Gore y su propuesta thrashera. Evidentemente es un grupo que está haciendo sus primeras armas sobre los escenarios y además el sonido no los ayudó. A éstos les siguió Sigma: heavy metal ochentoso con tintes glam. Por suerte el sonido mejoró considerablemente. Vaticiné un cover de Judas Priest y no le erré: cerraron con el hiper-quemado “Breaking The Law”. El cantante tiene un buen timbre para ejecutar temas del Metal God. A propósito ¿no hay ninguna banda tributo a Judas en la vuelta?

Minutos después subiría Logos, arrancando con “Viaje a la realidad”, temazo que abre “Plan Mundial Para La Destrucción” (excelente cd de 2006, cuya presentación era la excusa para esta primera visita); siguieron con “Darse Cuenta” del mismo álbum y “Arden en el cielo” de “Generación Mutante” de 1996. Con esos tres ganchos al mentón se metieron al público en el bolsillo de inmediato; lo que ardía era el complejo Central. Y sí, son años. Los tipos son grandes músicos: Roldán es un excelente guitarrista y la base rítimica compuesta por Marcelo Ponce y Walter Scasso es sólida y contundente (¡cómo sonó ese bajo!). Capítulo aparte para Alberto Zamarbide: el mítico ex cantante de V8, devenido en evangelista a fines de los ’80, posee un envidiable dominio de las tablas y hace uso y abuso de sus dotes histriónicas. Un frontman increíble.

La puesta en escena fue por demás austera. Nada de luces o banderas, lo que fue compensado con creces por el buen sonido, la entrega y la actuación impecable de los argentinos, además de la respuesta del público que nunca dejó de agitar y de corear todos los temas. El setlist siguió más o menos así: “Marginado”, “Sólo una vez más”, “Esclavos de sus mentes”, “Cuando acecha la maldad”, “Confusión mental”, “Muerte sin gloria”, “Son tiempos violentos”, “No te rindas” (con su espectacular solo powermetalero coreado por la gente), “Ven a la eternidad”, “La industria del poder” (TEMÓN!!!) y el anunciado cierre con “Como relámpago en la oscuridad”.

El mensaje cristiano es patente en la mayor parte de la lírica del cuarteto. De hecho, en el sitio web oficial del grupo, se puede leer lo siguiente, acerca del nombre elegido: “(…) ambos (Roldán y Zamarbide) coinciden en utilizar el vocablo griego ‘logos’ por encontrarlo afín al nuevo mensaje que desean transmitir, dado que este denota aquello que es ‘inteligente e inteligible’, y que traducido como ‘palabra’ o ‘verbo’ también es usado para expresar la verdad proclamada en las Sagradas Escrituras, en referencia a la persona de Jesucristo”.
¿Temas de V8? Bien, gracias. Ni uno. Aparte de quedarnos con las ganas de escuchar “Cautivos de un sistema” o “Deseando destruir y matar”, la única nota negativa fue que no volvieron a pesar del insistente “Logos no se va”. De todas formas, la primera presentación de Zamarbide y los suyos en tierras uruguayas fue de lo mejor del año. Será hasta la próxima, “si Dios quiere”.

La foto de Zamarbide pertenece a El Lado Oscuro (www.metal.com.uy).